En muchos casos, cuidarse puede ser la forma más efectiva de
reducir la apnea del sueño. Prueba estos consejos:
Incluso una pérdida ligera de peso puede ayudarte a aliviar la
constricción de la garganta. La apnea del sueño se puede curar en algunos casos
por un retorno a un peso saludable. Si aún no sigues un programa de pérdida de
peso, habla con tu médico acerca de cómo conseguir perder peso.
Haz ejercicio
Hacer 30 minutos de actividad moderada, como caminar a paso
ligero, la mayoría de los días de la semana, puede ayudar a aliviar los
síntomas de la apnea del sueño obstructiva.
Evita el alcohol y algunos
medicamentos, como
tranquilizantes, antihistamínicos y pastillas para dormir.
Estos relajan los músculos en la parte posterior de la garganta,
lo que interfiere con la respiración.
Duerme de costado o
boca abajo en lugar de boca arriba
Dormir boca arriba puede causar que la lengua y el paladar
blando se apoyen contra la parte posterior de la garganta y bloquear las vías
respiratorias. Algunos médicos recomiendan coser una pelota de tenis en la
parte posterior de la chaqueta del pijama para evitar que te quedes dormido
boca arriba.
Si no te sientes cómodo durmiendo de lado, pon un almohadón grande bajo la almohada que te mantenga la parte
superior del cuerpo elevada. Esta sencilla solución, tan utilizada por las
embarazadas para evitar el reflujo, es tremendamente útil para evitar la apnea
del sueño, ya que mantiene abiertas las vías respiratorias evitando las crisis
de apnea.
Mantén tus fosas nasales abiertas por la noche
Utiliza una lota nasal con agua de mar o un spray nasal salino para
ayudar a mantener tus fosas nasales abiertas. Procura evitar el uso de
descongestionantes nasales o antihistamínicos.
Evita el consumo de
cafeína
La cafeína puede interferir con tu ritmo normal de sueño.
Evita las cenas pesadas
Una comida pesada antes de irte a dormir puede impedir un
correcto descanso.
Respeta tus horas de
sueño
Mantener un horario de sueño
constante te asegurará que descanses las horas suficientes cada noche,
reduciendo tu cansancio y ayudando así a reducir los episodios de apnea del
sueño.
Practica Yoga
El yoga
conlleva ejercicios de respiración beneficiosos en la apertura de las vías
respiratorias. Con la práctica regular es posible controlar tu respiración y
asegurar el paso adecuado de aire dentro y fuera del cuerpo.
Deja de fumar, si eres fumador.
Fumar empeora la apnea obstructiva del sueño.
La valeriana
te puede ayudar a superar el insomnio derivado de la apnea. Te relaja, te ayuda
a quedarte dormido y a mejorar la calidad del sueño, y con ello a aprovechar tu
descanso.
Entre los remedios caseros para los trastornos del sueño también
se incluyen las nueces,
que son conocidas por mejorar la respiración. Las nueces se puede añadir a la
dieta diaria.
El ajo
ayuda a aliviar el agrandamiento de las amígdalas y la inflamación del sistema
respiratorio. Esto hace que te sea más fácil respirar con normalidad. Mastica
un diente de ajo antes de acostarte, haz una pasta de ajo picado y agua
caliente para consumirla antes de dormir, o, para tu mayor comodidad, sé
generoso con el ajo en tus comidas, especialmente en la cena (si le quitas el
corazón verde, no te repetirá).
Fotos: Free Digital
Photos: Sleeping Lion by James Barrer / Couple Lying In Bed by Ambro
La información
contenida en este blog tiene carácter meramente informativo y no puede ser
considerada como sustitutiva de la prescripción, diagnóstico o tratamiento
médico