Los niños necesitan un mínimo de siete minutos al día de
actividad física intensa, según demuestra una reciente investigación publicada
por la Universidad de Alberta.
Richard Lewanczuk, el investigador principal, afirma que
"los niños no necesitan mucha actividad física intensa para obtener los
beneficios del ejercicio." Siete minutos de actividad física intensa son
suficientes, pero esta actividad física debe ser intensa para prevenir el
aumento de peso, la obesidad y sus consecuencias adversas para la salud. En la
sociedad actual, la mayoría de los niños no tienen esa actividad.
Esto parece contradictorio con nuestras convicciones, pero, “sorprendentemente,
en realidad, es lo que esta investigación demuestra", dice Richard Lewanczuk, investigador de la Facultad de
Medicina y Odontología de la Universidad de Alberta.
Lewanczuk trabajó en este estudio con Jonathan McGavock, que actualmente trabaja en el Instituto de Salud
Infantil de Manitoba. Colaboraron con varios colegios y universidades y los
hallazgos del equipo fueron publicados recientemente en la revista Archives of
Pediatrics & Adolescent Medicine.
Más de 600 niños, entre las edades de 9 a 17 años, llevaban
monitores que hacían seguimiento de sus niveles de actividad física durante
siete días. También se les tomaban regularmente mediciones de su peso, cintura
y presión arterial.
Los investigadores revisaron los datos recogidos a través del
programa Healthy Hearts y determinó que los niños pasaban casi un 70 % de su
tiempo en actividades sedentarias, casi el 23 % hacía actividad una física ligera,
casi el 7 % por ciento hacía actividad
física moderada y el 0,6 % hacía actividad física vigorosa.
En general, los niños eran menos sedentarios que las niñas. Y
cuanto más vigorosa era la actividad física, menos propensos eran a tener
sobrepeso. Además, los niños con sobrepeso mejoraron los niveles de aptitud y
redujeron cintura cuando se incrementó la cantidad de tiempo que dedicaban a
hacer actividades vigorosas.
Según Lewanczuk, el equipo hizo algunos otros hallazgos notables.
Como por ejemplo, que los beneficios para la salud de hacer sólo una actividad
leve o moderada no fueron los esperados, aunque el tiempo dedicado a hacer este
tipo de actividad aumentara. Lo que parecía ser crítico era que la actividad
física había de ser intensa. Para los niños que realizaban la actividad física
intensa durante más de siete minutos, los beneficios para la salud eran
significativamente mejores.
"Esta investigación nos dice que una caminata rápida no es
lo suficientemente buena", dice Lewanczuk, que ha estado estudiando este
tema desde hace ocho años. "Los niños tienen que salir y hacer una
actividad de alta intensidad, además de mantener un fondo actividad de leve a
moderada. Hay una fuerte correlación entre la obesidad, la aptitud y la
actividad. La actividad y la forma física están vinculadas a la reducción de la
obesidad y a los buenos resultados de salud."
Lograr que los niños y jóvenes tomen la actividad física intensa
como una de sus rutinas diarias es importante, sobre todo teniendo en cuenta
los niveles de actividad caen en los años de la adolescencia, dice Lewanczuk.
Además, las investigaciones publicadas previamente en el mismo
grupo de niños muestran que los niños son más activos en la escuela que en
casa. "Muy a menudo los niveles de actividad en la tarde noche o los fines
de semana son casi nulos", dice. "por lo que presumimos que los niños
estaban sentados frente a una pantalla todo el tiempo."
Paul Wozny, co-autor del proyecto Healthy Hearts de Alberta,
dijo que la actividad física siempre vale la pena, y señaló que el aumento de
actividad de moderada a intensa está estrechamente relacionada con una pérdida
de peso de año en año. Wozny afirma que el proyecto Healthy Hearts ha creado
"una cultura en la que se ve la actividad física regular y la
alimentación sana como ingredientes esenciales para los estudiantes de la
salud, el bienestar y el aprendizaje durante toda la vida. Todo el mundo está
involucrado: los estudiantes, sus padres, los maestros, el personal, los
investigadores y la comunidad en su conjunto.
El proyecto Healthy Hearts ha recibido reconocimiento nacional e
internacional como una iniciativa líder en el mundo escolar dedicada a la
mejora de la salud cardiovascular a través la actividad física regular del
alumno. Los principales financiadores de la investigación fueron: la Asociación
Canadiense de la Diabetes y el Alberta Centre for Child, Family and Community
Research.
"La Asociación Canadiense de Diabetes alienta a las
personas a perseguir estilos de vida saludables para prevenir y controlar la
diabetes. El trabajo del Dr. Lewanczuk proporciona nuevas e importantes ideas
que pueden hacer que niños y jóvenes se involucren en una mayor actividad física",
afirma la propia asociación.
Este tipo de pruebas alientan a los padres y a las escuelas a hacer
actividades con los niños que ayuden a desarrollar actitudes saludables para
toda la vida hacia el ejercicio y la actividad", dijo Robyn Blackadar el
presidente del Alberta Centre for Child, Family and Community Research.
El próximo miércoles, 14 de noviembre, es el Día Internacional
de la Diabetes. Este día es la campaña de concienciación sobre la diabetes más
importante del mundo.
Actualmente la diabetes tipo 1 no se puede prevenir. Pero, la
diabetes tipo 2, sin embargo, sí se puede prevenir en muchos casos, manteniendo
un peso sano y siendo físicamente activo. Es importante ayudar y alentar a las
personas en riesgo a mantener un peso saludable y a realizar ejercicio
frecuentemente.
Fuentes:
University of
Alberta Faculty of Medicine & Dentistry (2012, November 9). Kids need at
least seven minutes a day of 'vigorous' physical activity, but most aren't
getting that. ScienceDaily. Retrieved November 11, 2012, from http://www.sciencedaily.com
/releases/2012/11/121109162026.htm
Fotos: Free Digital Photos: Young Boy Swimming by Arvind
Balaraman /Adorable Boy With Basketball by photostock
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